Como ya hemos explicado en otras ocasiones, el salario bajo demanda es un beneficio social que permite a los empleados el cobro del salario ya devengado, fraccionado y en tiempo real, lo que, entre otras muchas ventajas, repercute en la satisfacción del empleado y reduce la rotación laboral en un 20%. Este es uno de los modelos más flexibles, y normalmente las organizaciones que deciden implantarlo lo hacen porque tanto empresas como trabajadores salen ganando.
Otra de las ventajas del salario bajo demanda es que resuelve 4 de los principales inconvenientes por los cuales a los trabajadores les cuesta solicitar un anticipo a sus empresas cuando lo necesitan. Ante esta problemática, surgen Apps como PayGate, que permiten que sea el propio trabajador el que gestione su salario, teniendo acceso al mismo para cobrar de manera anticipada lo que haya devengado siempre que quiera, sin tener que solicitarlo al empresario previamente. A continuación, presentamos las principales razones por las que los trabajadores tienen complicaciones a la hora de solicitar anticipos de nómina a sus empresas, y a las que el salario bajo demanda y las herramientas como PayGate ponen solución.
Desconocimiento de sus derechos como trabajadores
Si bien es cierto que los adelantos constituyen un derecho que tienen los trabajadores, en muchos casos éstos desconocen la ley por la que pedir un anticipo es su derecho cuando su situación financiera lo necesita. En realidad, es bastante común que las personas desconozcan algunos aspectos de la legislación, independientemente de su experiencia o rango laboral.
Sentimiento de vergüenza o temor al “qué dirán”
A veces, aun conociendo la ley y sabiendo que es su derecho, otro de los principales motivos por los cuales los empleados tienen reparos a la hora de solicitar anticipos es el sentimiento de culpabilidad, vergüenza o incomodidad que esto puede producirles, motivo por el cual tratan de solucionar sus problemas financieros de otra forma. De igual forma, también es común que las personas eviten solicitar adelantos a sus empresas por el temor a lo que puedan decir o pensar otras personas de su entorno, como amigos, familiares o compañeros de trabajo. De hecho, cuando la situación financiera de una persona pasa por un mal momento es algo sumamente delicado, y hay quienes prefieren que nadie se entere de su insolvencia, tratando de esconder al máximo estos problemas.
Excesiva burocracia
Por otro lado, otro de los inconvenientes que caracterizan a los anticipos de nómina son los largos y complicados trámites que normalmente conllevan, lo que hace que sea otro de los motivos por los cuales los trabajadores decidan no realizar este tipo de peticiones. Hay empresas en las cuales este proceso puede durar varios días y esto, añadido a los tiempos propios de las transacciones bancarias, puede repercutir en que el adelanto se efectúe hasta cuatro o cinco días después de la solicitud, un margen que puede resultar a veces crítico para la persona, dependiendo del motivo por el cual esté solicitando el anticipo.
Otras limitaciones de las empresas
En cada empresa se establecen determinados requisitos para la solicitud de anticipos, como la cantidad de los mismos que los empleados pueden llegar a recibir o los días en los cuales pueden solicitarse, lo que marca la flexibilidad que puede haber en cada empresa con relación a estos trámites. Por ello, aunque la ley establezca que los anticipos constituyen un derecho de los trabajadores, existen casos en los que para solicitarlos hay que adaptarse a los requisitos que establece cada compañía, razón por la cual a veces los empleados buscan otras formas de solucionar sus problemas financieros, ya que la urgencia que en ocasiones genera la necesidad de liquidez choca con las especificaciones que las organizaciones puedan establecer para los anticipos.
En conclusión, ante todas estas razones por las que los trabajadores evitan solicitar anticipos de nómina, PayGate es la solución, ya que permite el poder acceder a la nómina devengada siempre que el empleado lo necesite.